México, 21 de octubre (Reforma).- James Cavallaro, integrante de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), consideró preocupante el índice de letalidad en las acciones de las fuerzas del Estado mexicano.
En el marco de la sesión sobre ejecuciones extrajudiciales en México, realizada ayer en la sede de la OEA, con presencia de representantes de organizaciones civiles y del Gobierno federal, consideró urgente investigar a fondo las denuncias de abusos por partel Ejército, la Marina y corporaciones policiacas.
El especialista en derechos humanos señaló que cuando se habla de enfrentamientos entre las fuerzas del orden y presuntos delincuentes, se podría esperar cierto equilibrio entre el número de muertos y de heridos.
“Cuando hay enfrentamientos reales y se habla de la delincuencia organizada con capacidad de fuego alta, se supone que hay algún tipo de equilibrio. Por tener capacitación más profesional, las fuerzas de orden tendrían menos bajas que los delincuentes, pero las cifras son 20 veces más altas, y cuando se desglosa, con la Semar llega a 60 veces más”, alertó.
“Se dice que este caso va a ser investigado, y que el otro va a ser investigado, pero cuando se habla de 4 mil personas muertas contra 200 militares…
“Insisto, yo no quiero que ningún agente del Estado se muera por su trabajo, pero tampoco queremos que civiles mueran por falta de reconocimiento de la gravedad del problema”, externó.
Por otra parte, durante la audiencia pública, representantes de organizaciones civiles demandaron poner fin a la militarización de la seguridad pública en México.
En su intervención, integrantes del Centro Prodh, Tlachinollan y Fundar denunciaron que tras registrarse enfrentamientos del Ejército y la Policía Federal con el crimen organizado no se realizan las diligencias necesarias, hay manipulaciones de las escenas del crimen e intentos de señalar a las víctimas como criminales.
Como ejemplo, citaron casos como Tlatlaya, en el Estado de México; Apatzingán, Tanhuato y Ostula, en Michoacán; Calera, en Zacatecas, e Iguala, en Guerrero.
“Las ejecuciones extrajudiciales constituyen uno de los temas más urgentes de la crisis actual, se trata de una práctica fomentada por la impunidad de años y décadas pasadas y que se vio agravada por la militarización de la seguridad pública que sigue vigente”, advirtió Stephanie Brewer, del Centro Prodh.
José Díaz Briseño, César Martínez y Diana Baptista
