México, 15 de diciembre.- El pasado 1 de diciembre se formalizó la entrada en operación de la Unidad Nacional de Operaciones Estratégicas (UNOE), un cuerpo policial civil que depende de la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial, el área que tiene acceso a la mayor plataforma de información pública y privada en aras del combate a la delincuencia organizada. Su papel es la apuesta del gobierno de Claudia Sheinabaum por recuperar el control y seguridad de buena parte del territorio nacional basados en inteligencia táctica y estratégica, considerada una área donde iría codo a codo con las unidades de élite de las fuerzas armadas que acaban de cerrar el año de intercambios operacionales con el Comando Norte.
La formalización de la entrada en funciones de la Unidad Nacional de Operaciones Estratégicas (UNOE) de la secretaría de Seguridad de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), ocurrió en medio de dos eventos fuera del foco mediático donde unidades de élite de la Marina Armada de México cerraron el año del calendario de adiestramiento con cursos de actualización en operaciones como parte de los acuerdos entre las fuerzas armadas mexicanas y el Comando Norte (USNORTHCOM).
Primero ocurrió la salida hacia la base militar estadounidense de Camp Shelby, Mississippi, de 60 efectivos de la Unidad de Operaciones Especiales de la Armada de México a bordo de un avión militar de Fuerza Aérea Estadounidense C-130 Hércules, para participar en un entrenamiento del 1 de octubre al 15 de noviembre cuyo objetivo se resumió en “aumentar la capacidad operacional” de los marinos mexicanos.
Poco después entre el 6 de octubre al pasado 12 de diciembre estuvieron en el país 12 elementos de las fuerzas especiales del Destacamento de Operacional Alpha (ODA) 751 del Séptimo Grupo de Fuerzas Especiales del Ejército estadounidense para continuar con las actividades de adiestramiento dentro de la Mesa Redonda de Cooperación Bilateral Militar (BMCR por sus siglas en inglés), con el objetivo de “Mejorar la Capacidad de las Fuerzas de Operaciones Especiales”, el cual se realizó en dos fases. La primera fue del 6 de octubre al 28 de noviembre en el Centro de Entrenamiento Avanzado de la Martina Armada de México en el municipio de Donato Guerra, Estado de México, y del 1 al 12 de diciembre en el Polígono de Antón Lizardo, en la Heroica Escuela Naval Militar en el puerto de Veracruz.
Con estos eventos de fondo se formalizó el 1 de diciembre la entrada oficial en operación de la UNOE conformado por agentes civiles cuyo objetivo, según el acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación sería el de “organizar, dirigir y supervisar la investigación y persecución de delitos”, todo basado en “inteligencia, información estratégica, análisis, colaboración, práctica de operaciones especiales y aprovechamiento de la tecnología informática.
Las funciones que tendrán quedaron establecidas en seis puntos:
I. Planear y ejecutar acciones de inteligencia, investigación y estrategias tácticas operativas para la identificación y captura de generadores de violencia;
II. Establecer procedimientos para atender incidentes potenciales que pongan en riesgo la seguridad de las personas, bienes y el medio ambiente;
III. Determinar los mecanismos orientados al acompañamiento, prevención y reacción ante emergencias que requieran la protección a personas servidoras públicas que sean propensas a agresiones o actos delictivos;
IV. Implementar los esquemas de entrenamiento y capacitación especializada en tareas conjuntas y operaciones especiales, en coordinación con otras instituciones de seguridad;
V. Instrumentar mecanismos de colaboración con las áreas de investigación de la Secretaría, las instituciones de seguridad pública de los tres órdenes de gobierno y las instancias competentes a nivel internacional, y
VI. Garantizar la atención de objetivos prioritarios y dar cumplimiento a mandamientos ministeriales y judiciales.
“LOS HARFUCH”
Los integrantes de la UNOE operan desde hace varios meses en varios lugares del país como Sinaloa, Estado de México, Michoacán y Jalisco, aunque el despliegue de agentes de la SSPC se hizo más visible en la segunda mitad del año en varias partes del país.
El área clave en la estructura es la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial (SIIP), que estuvo encabezada hasta hace un par de semanas por Héctor Elizalde Mora, nombrado nuevo titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Fiscalía General de la República (FGR).
El área que tiene acceso a la Plataforma Central de Inteligencia es la SIIP, de la que depende la UNOE, que desde su creación en julio pasado está conectada a toda clase de información ya sea pública o privada.
La operación de la UNOE estaría detrás de los últimos golpes que se han dado a personajes del sindicalismo vinculados a la delincuencia organizada, como ocurrió a mediados de octubre en Jalisco con el líder transportista de la CTM Nazario “N”, identificado como operador de las extorsiones en este ramo y en el de la construcción para el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Otro caso sería el de Edgar “N” alias “el Limones”, que se asumía como líder de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México en la región lagunera e identificado como operador de la célula criminal de los Cabrera, afines al clan Zambada, con operaciones delincuenciales en Durango y Coahuila. Este caso por las conexiones financieras, políticas y sindicales sería un ejemplo del uso de las atribuciones de investigación que se le dieron a la UNOE.
La presencia de los agentes civiles ya comenzó a generar recelo en las filas militares. En redes sociales algunas cuentas que difunden información con cierto grado de veracidad y que posteriormente se confirma con declaraciones oficiales y detenciones, han cuestionado la preparación para operaciones de alto impacto de los civiles que conforman la UNOE.
Un ejemplo se publicó hace unos días en la red de X:
“Déjenlos operar solos sin la seguridad de marinos y militares para ver si los resultados son los mismos UNO (Unidad Nacional de Operaciones) quieren crear operadores nivel 1 de unos meses para acá e igualar a las fuerzas especiales de semar y defensa con años de experiencia”, decía un post de la cuenta que se identifica como “el blog de los guachos”, abierta en junio de 2025 y que hasta estos primeros días de diciembre rebasaba los 40 mil seguidores.
El despliegue de las fuerzas especiales de la Marina y del Ejército, de acuerdo a los datos difundidos en las conferencias matutinas de los martes en las últimas semanas, se ha focalizado sobre objetivos marcados como estratégicos y “relevantes” como ha ocurrido en el Estado de México, Sinaloa, Durango, Michoacán y Jalisco, donde a las detenciones de los líderes sindicales se suman la de cabecillas de organizaciones de tráfico de drogas.
Juan Veledíaz / @velediaz424 / EstadoMayor.mx