Buques de guerra en el Golfo y Pacífico mexicano

México, 24 de marzo.- Dos hechos de relevancia en la agenda militar binacional para las fuerzas armadas mexicanas y sus socios estadounidenses quedaron establecidos con la hoja de ruta contra los cárteles de la droga y la inmigración ilegal anunciada durante este mes por el Comando Norte (USNORTHCOM). La primera es la creación de la Fuerza de Tarea Conjunta estadounidense que se encargará del sello militar desde Imperial Beach, California a McAllen, Texas. El segundo es el despliegue de dos buques de guerra de la Armada estadounidense en el Golfo y en el Pacífico con la mira en la costa atlántica y la frontera sur mexicana. 

Foto: USNORTHCOM

La noticia difundida en la tercera semana de marzo reforzó la percepción de que las fuerzas armadas estadounidenses preparan una serie de acciones contra los cárteles de la droga mexicanos, aunque los medios no están todavía muy claros. Un buque de misiles guiados clase Arleigh Burke USS Spruance (DDG III) fue desplegado el pasado sábado 22 por la marina estadounidense rumbo a la frontera sur de México en las costas del Pacifico. La nave usa el sistema de combate Aegis que es utilizado para el combate naval integrado, se caracteriza por utilizar radares potentes y sistemas computacionales avanzados para rastrear y guiar misiles sobre blancos específicos. 

El despliegue sumado a las operaciones con drones equipados con el sistema ISR (Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento) en territorio mexicano, son señales de que “algo sumamente serio se prepara” y hablan de que se están cumpliendo los requisitos para lanzar operaciones militares, señaló una fuente militar que pidió no ser citada. Para todo comandante de tropas el concebir, preparar y conducir son los pasos necesarios para una acción militar. Con las declaraciones desde el inicio de su segundo mandato de Donald Trump, que fijó como blanco militar a los cárteles de la droga mexicanos, se concibió la puesta sobre la mesa y comenzaron los preparativos para una operación, la cual con el despliegue de naves por aire y por mar se puede afirmar que está en curso, y “solo faltaría conducir las operaciones”, dijo este oficial consultado en la Ciudad de México.

El despliegue del buque de misiles guiados Spruance, es “en apoyo a la misión del Comando Norte (USNORTHCOM) de restaurar la integridad territorial en la frontera sur de Estados Unidos”, informó el Comando Norte el sábado 22. “El Spruance refuerza el compromiso nacional con la seguridad fronteriza al fortalecer las iniciativas marítimas y apoyar la colaboración interinstitucional”. 

“Las operaciones del buque destacan la dedicación del Departamento de Defensa y la Armada a las prioridades de seguridad nacional contribuyendo a una respuesta coordinada y sólida para combatir el terrorismo marítimo, la proliferación de armas, la delincuencia trasnacional, la piratería, la destrucción del medio ambiente y la inmigración ilegal por mar”.

El objetivo es el control operativo de la frontera sur estadounidense por tierra, mar y aire. “Con Spruance frente a la costa oeste y el USS Gravely en el Golfo de América (como lo llamó Donald Trump), nuestra presencia marítima contribuye a la respuesta coordinada del Departamento de Defensa y la Orden Ejecutiva Presidencial y demuestra nuestra determinación de lograr el control operativo de la frontera”, dijo el general de la fuerza aérea Gregory S. Guillot, jefe del USNORTHCOM. 

En la primera semana de marzo el Pentágono anunció el despliegue del USS Gravely, un barco destructor que está equipado con misiles Tomahawk y cuya misión más reciente fue en el Mar Rojo contra la guerrilla hutíe en Yemen. El Gravely está considerado como la avanzada para misiones de intercepción de narcóticos liderada por la Guardia Costera estadounidense y que en días pasados decomisaron un cargamento de 20 toneladas de cocaína en Florida.

Reportes del Pentágono señalan que el buque Spruance regresó el pasado 19 de diciembre a la base naval de North Island, San Diego, tras un despliegue de cinco meses en las áreas de operación de la 5ª flota (que opera en el Golfo Pérsico, Mar Rojo, Golfo de Omán y un sector del Océano Índico), y 7ª flota (Océano Pacífico Occidental y en el Índico) como parte del grupo de ataque que comanda el portaaviones USS Abraham Lincoln (CVN-72). 

Sobre el despliegue del destructor Gravely en el Golfo de México, el almirante Daryl Caudie, jefe del Comando del Norte de las fuerzas navales, señaló que “marca una mejora vital en el marco de seguridad fronteriza de nuestra nación”.

“En colaboración con nuestros socios interinstitucionales, Gravely fortalece nuestra presencia marítima y ejemplifica el compromiso de la Marina con la seguridad nacional y la salvaguarda de nuestra integridad territorial con profesionalismo y determinación”. La nave lleva a bordo un destacamento de la Guardia Costera que tiene varias misiones de interdicción marítima, que incluyen operaciones contra migración ilegal, tráfico de drogas y apoyos humanitarios. Estos se suman a las operaciones de combate militar, lucha contra el terrorismo y seguridad nacional, que son las misiones regulares de este tipo de buques. 

INGENIEROS MILITARES A LA FRONTERA 

El pasado 17 de marzo desde su sede en Colorado Springs el USNORTHCOM anunció que alrededor de 400 miembros “adicionales” a los ya desplegados en la frontera sur con México, serían enviados desde diferentes bases en los Estados Unidos. La mayoría son ingenieros de combate cuya misión será la construcción y “apoyo a la movilidad y varias operaciones de ingeniería adicionales” que se requieren ante la llegada de efectivos a diferentes puntos en los más de 3 mil kilómetros de frontera con México. 
Desde Fort Drum, Nueva York el Comando Norte anunció que será enviado el 41 batallón de ingenieros que pertenece a la 10ª división de montaña, de esta misma unidad se incorporará también la compañía de ingenieros 642. De Fort Carson, Colorado, será desplegada la 76 compañía de ingenieros de combate Stryker, y el 4º batallón de ingenieros, ambos de la 4ª división de infantería. 

“También se aprueban para desplegar elementos adicionales de las siguientes unidades: el cuartel general, 3ª brigada de aviación de combate, 3ª división de infantería, de Fort Stewart, Georgia, proporcionará mando y control y otras funciones de personal para las operaciones de aviación. El 6º centro de gestión logística médica de Fort Detrick, Maryland, proporcionará una gestión centralizada de la logística médica desplegada. Además, la 3ª brigada de aviación de combate proporcionará varios sistemas de aeronaves no tripuladas (UAS) MQ-1C Gray Eagle con capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento aerotransportado (A-ISR) y su personal de operaciones en apoyo a la frontera sur. No se ha determinado el cronograma exacto para estas implementaciones”, señaló el USNORTHCOM
Con este despliegue el número de tropas enviadas a la frontera con México aumentó a 10 mil entre unidades de infantería, marines, operaciones aéreas, servicios y logística. 

FUERZA DE TAREA CONJUNTA

El pasado 14 de marzo el USNORTHCOM anunció que activó la Fuerza de Tarea Conjunta (JTF-SB) con sede en Fort Huachuca, Arizona, cuya finalidad será “sincronizar tácticamente los esfuerzos del Departamento de Defensa para asegurar y sellar la frontera sur”. La Fuerza de Tarea Conjunta, que estará al mando del mayor general del ejército Scott M. Naumann, se encargará de “alinear los esfuerzos para sellar la frontera sur y repeler la actividad ilegal bajo un único Grupo de Trabajo Conjunto, responsable de operaciones a gran escala, ágiles y en todo el dominio, lo que permitirá operaciones más efectivas y eficientes. El Grupo de Trabajo Conjunto-Norte continuará con su misión principal de detectar y monitorear amenazas de las organizaciones criminales trasnacionales dentro y a lo largo de los Estados Unidos”. 

Al inicio de febrero pasado se desplegó la 10 división de Montaña de infantería ligera desde su sede en Fort Drum, Nueva York, a Fort Huachuca, Arizona, teniendo entre sus objetivos establecer la infraestructura necesaria para el cuartel general de la Fuerza de Tarea Conjunta que tiene dos comandancias adjuntas, una es de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), y otra del Cuerpo de Marines. 
“El ejército tiene una historia de casi 250 años de proporcionar capacidades militares únicas a nuestros líderes nacionales. Esta misión no es diferente. Desde Imperial Beach, California hasta McAllen, Texas, emplearemos esas capacidades y tecnología para reforzar los esfuerzos de nuestros socios interinstitucionales, con el fin de obtener el control operativo de la frontera, según lo ordenado”, dijo el mayor general Naumann. 

Juan Veledíaz / @velediaz424 / EstadoMayor.mx

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