México, 18 de junio.- La Guardia Nacional de los Estados Unidos (United States National Guard, en inglés), es una fuerza de reserva que la integran tanto elementos del Ejército como de la Fuerza Aérea, y está facultada para activarse en misiones del ámbito federal, incluso, fuera de territorio nacional.

Cuando se dan situaciones graves o extremas en la Unión Americana, tales como las que persisten hoy en día por la caza de migrantes hispanos, el presidente en turno, en este caso Donald Trump está facultado para poner bajo su control, ya sea una parte o en su totalidad a las guardias nacionales de cada estado. Poco se sabe de este agrupamiento militar.
A través de su sitio web oficial, en este, se señala que está compuesta por miembros o unidades militares de la Guardia Nacional de cada estado de la Unión Americana y los territorios de Guam, las Islas Vírgenes, del Distrito de Columbia y hasta la del propio Puerto Rico, lo que da un total de 54 organizaciones.
Es importante decir que las personas que integran esta fuerza, en su mayoría tienen un trabajo civil a tiempo completo mientras sirven a tiempo parcial como miembros de la Guardia Nacional, es decir, pueden tener un oficio, pero cuando son requeridos por la corporación atienden el llamado. En tanto, hay otros miembros que se encuentran de una forma permanente, ya sea en la Guardia Nacional del Ejército o en la Guardia Nacional Aérea.
Si bien, su historia se remonta a 1824 cuando recibió el título o nombre en cuestión y “fue derivado por algunas unidades de milicias del estado de Nueva York, nombradas en homenaje a la Guardia Nacional Francesa en honor al marqués de Lafayette”.
“Guardia Nacional se convirtió en un título estándar de milicia a nivel nacional en 1903, y ha indicado específicamente fuerzas de reserva bajo control mixto estatal y federal desde 1933”, se lee en un documento del sitio web.
Ahora, la misión de esta institución es atrapar a toda aquella persona centro o sudamericana que pretenda evadir los arrestos por hallarse de forma ilegal en los EEUU, principalmente en los estados de California, Arizona, Nuevo México y Texas, que colindan con Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, debido al fácil acceso de migrantes indocumentados.
La cacería ha iniciado
Tras la llegada de Trump, se han registrado 81 mil 283 detenciones de extranjeros sin la documentación que acredite su legal estadía en suelo estadounidense, para algunos estas acciones las ven arbitrarias, pero para otros un simple aseguramiento con el que cumplen estos guardias del Estado.
La Guardia Nacional ha llevado a cabo estos arrestos en coordinación con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de EEUU (ICE, por sus siglas en inglés), a quienes además deben proteger ante cualquier contingencia.
Para llevar a cabo estas tareas, se dio un despliegue de al menos 2 mil efectivos, los cuales deberán estar aproximadamente 60 días, esto, de acuerdo a la orden emitida del pasado 7 de junio del año en curso.
“Las protestas violentas amenazan la seguridad de los centros federales de detención de inmigrantes y otras propiedades federales, y causan daños considerables a estos. En la medida en que las protestas o los actos de violencia inhiben directamente la aplicación de las leyes, constituyen una forma de rebelión contra la autoridad del Gobierno de Estados Unidos”, se lee en un memorando del Departamento de Defensa para la Protección de las Funciones del Departamento de Seguridad Nacional.
Es preciso aclarar que los militares pueden proteger instalaciones y agentes federales, aunque no tienen la facultad del todo para arrestar migrantes, no obstante sí pueden detener temporalmente a civiles mientras esperan a que lleguen oficiales de Policía para realizar el aseguramiento, esto, de acuerdo a lo dicho por el general de división Scott Sherman encargado del despliegue de las tropas en Los Ángeles, mediante una rueda de prensa ofrecida el 11 de junio.
Rodrigo Alarcón / @tiburon_alarcon / EstadoMayor.mx
