México, 17 de febrero.- Asoma la posibilidad de operaciones conjuntas entre las fuerzas especiales del ejército estadounidense y sus homólogos de la Marina y el Ejército mexicano contra las organizaciones criminales de tráfico de drogas en el país. El aviso de que ese sería uno de los primeros objetivos de los vuelos de recopilación de información de inteligencia de las aeronaves estadounidenses en la frontera y la zona marítima internacional del Pacífico norte y el Mar de Cortés, lo hizo jefe del Comando Norte quien pidió al Senado estadounidense ampliar la base legal para actuar junto a sus socios mexicanos.

La tecnología militar de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR, por sus siglas en inglés) implementada vía aérea en las últimas dos semanas por el Comando Norte (USNORTHCOM) contra las organizaciones criminales de tráfico de drogas mexicanas, ha aportado datos muy relevantes sobre sus operaciones y capacidades. El pasado miércoles 13 de febrero el general de la Fuerza Aérea estadounidense Gregory M. Guillot, jefe del Comando Norte, solicitó en su comparecencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado norteamericano, mayores facultades legales para implementar operaciones conjuntas con las fuerzas especiales del Ejército y la Marina Armada de México, con quienes se ha trabajado muy de cerca en entrenamiento y asesoría. Estas operaciones serían contra los cárteles que trafican drogas como el fentanilo y cocaína además de que controlan las rutas de migrantes ilegales que buscan entrar a los Estados Unidos.
Cuestionado por el senador republicano Roger Wicker sobre las necesidades del Comando Norte para lograr avanzar en los objetivos contra el tráfico de fentanilo, el general Guillot dijo que lo primero sería una “mayor vigilancia y (operaciones de) reconocimiento de inteligencia. Y después se requerirían facultades más amplias para asesorar y ayudar en más tipos de operaciones entre nuestras fuerzas y las fuerzas (armadas) mexicanas de primer nivel”.
Guillot dijo que en fechas recientes el Departamento de Defensa autorizó al Comando Norte a realizar más operaciones de reconocimiento y vigilancia, aludiendo al incremento de los vuelos en la frontera y en la zona del Mar de Cortés que registró la semana pasada este Blog (Aumentan las operaciones aéreas estadounidenses https://www.estadomayor.mx/108470). El jefe del USNORTHCOM añadió que se ha compartido la información de inteligencia con el Ejército y la Armada de México para mostrar lo que han encontrado en estos vuelos, además de aumentar la cooperación para abordar la violencia de los cárteles mediante el envío de más tropas a la frontera.
En su alocución introductoria ante el comité senatorial, el jefe del Comando Norte dijo que las organizaciones delictivas transnacionales con sede en México son una amenaza a la soberanía y a la integridad territorial de los Estados Unidos por medio de la producción y tráfico de fentanilo, cocaína y otras drogas ilícitas además de que sus redes operan la “migración masiva ilegal hacia el sur de Estados Unidos”. Guillot añadió que “la violencia relacionada con el narcotráfico se ha intensificado en los últimos años debido a la lucha de los cárteles rivales por el control de los lucrativos mercados de la droga y el contrabando de migrantes, y demuestran una voluntad cada vez mayor de enfrentarse directamente a las fuerzas de seguridad mexicanas, lo que aumenta el riesgo de que se produzcan ataques terroristas. directamente a las fuerzas de seguridad mexicanas, lo que aumenta el riesgo de que la violencia se extienda a Estados Unidos”.
BASES DE ISR
Las fuerzas armadas mexicanas han recibido capacitación del Comando Norte por lo menos desde el año 2022 en Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento, una de las herramientas que el general Guillot expuso como parte de las operaciones aéreas de las últimas semanas en la frontera norte y en la zona del Mar de Cortés.
Tomando como base la Mesa Redonda de Cooperación Militar Bilateral (BMCR por sus siglas en inglés), se ha hecho especial énfasis en “fortalecer la compatibilidad operativa y las capacidades combinadas de interdicción”, uno de los objetivos de la “línea de esfuerzo” titulada “Control del Entorno/Área”, que tiene entre los objetivos intermedios “reforzar las capacidades y la compatibilidad operativa de las Fuerzas Especiales para contrarrestar amenazas asimétricas”.
Oficiales de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) estuvieron en el primer semestre del 2022 en Crestview, Florida, sede la base Eglin de la Fuerza Aérea estadounidense, para tomar el curso de “Capacitación Aerotransportada de Misión de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR)”. Este curso capacitó a pilotos y operadores de la Fuerza Aérea Mexicana en sensores de misión (MSO). Fue un evento para enseñar y certificar a los instructores de México del Curso de Capacitación de Misión de ISR Aerotransportada, de acuerdo con documentos militares a los que este Blog tuvo acceso.
La “líneas de esfuerzo” de “Control del Entorno”, tiene un apartado muy amplio en el capítulo de entrenamiento a las fuerzas especiales del Ejército y la Marina Armada de México. Un primer curso es el llamado de “Calificación para Fuerzas Especiales”, realizado en Fort Bragg, Carolina del Norte, donde los militares mexicanos han recibido la orientación encaminada hacia Fuerzas Especiales. Se les da un panorama de “la cultura mundial y el aprendizaje, métodos de instrucción, tácticas de unidades pequeñas, organización de escuadrones, formaciones de patrullaje y movimiento, y navegación terrestre.
Posteriormente, son entrenados y deberán calificar en habilidades comunes de las Fuerzas Especiales; navegación terrestre; operaciones aéreas; puntería avanzada de armas; tácticas de unidades pequeñas; operaciones militares en terreno urbano; combatientes modernos del Ejército. Entrenamiento de supervivencia; planificación de misiones de las Fuerzas Especiales. Entrenamiento de adaptabilidad cognitiva y habilidades interpersonales; defensa interna extranjera; contrainsurgencia; operaciones de la Fuerza de Tarea Conjunta de Operaciones Especiales Combinadas (CJSOTF); guerra no convencional; y ejercicios de Entrenamiento de campo”.
Otro de los cursos que se han desarrollado en la escuela de guerra especial del ejército estadounidense, sede de los célebres Boinas Verdes, es el “curso para suboficiales de Operaciones/Fuerzas Especiales Aliadas”. Ahí el objetivo es que “el suboficial reciba una orientación para las Fuerzas Especiales. Posteriormente, será entrenado y deberá calificar en habilidades comunes de las Fuerzas Especiales; navegación terrestre; operaciones aéreas; puntería avanzada de armas; tácticas de unidades pequeñas; operaciones militares en terreno urbano; Entrenamiento de supervivencia; guerra poco convencional; planificación de misiones de las Fuerzas Especiales; construcción militar básica; fortificación; reconocimiento de ingeniero; demoliciones básicas e intermedias; despeje de artefactos explosivos improvisados y sin detonar; análisis/interdicción de objetivos y planificación de misiones; apoyo aéreo cercano y ejercicios de entrenamiento de campo”. De acuerdo con el documento consultado, los oficiales que cumplen todas las normas del curso para la graduación reciben la insignia de las Fuerzas Especiales de los Estados Unidos, la boina verde y el cuchillo Yarborough. “Todos los oficiales que completen el curso pero que no cumplan con todos los estándares del curso reciben un Certificado de Asistencia”.
Uno de los cursos que también han recibido los militares y marinos mexicanos como parte de los acuerdos con el Comando Norte, es el de “Combate a la Red de Amenazas Transnacionales”, el cual está “especializado a nivel estratégico y diseñado para entender y discutir el fenómeno de las redes de amenazas transnacionales, sus impulsores, causas y las actividades ilícitas en las que participan, así como analizar y evaluar las actuales estrategias y políticas para combatir las redes de amenazas transnacionales en el continente americano”. Los objetivos de este curso perfilan el tratamiento que se le ha dado en la naciente administración Trump a los cárteles de la droga mexicanos y sus redes transnacionales.
La columna vertebral del Ejército mexicano en esta etapa de alianza con el Comando Norte en su rama de fuerzas especiales, es el Centro de Estudios Operacionales del Estado Mayor Conjunto de la Defensa Nacional, desde donde se selecciona a elementos de la Fuerza Especial de Reacción de la Brigada de Fusileros Paracaidistas, del Cuerpo de Fuerzas Especiales y Fuerza Especial de la Brigada de Fusileros Paracaidistas, para ser entrenados por instructores de la Universidad de Operaciones Especiales Conjuntas (JSOU por sus siglas en inglés), del ejército estadounidense.
Es a este segmento de “primer nivel” de las fuerzas armadas mexicanas como lo llamó el general Guillot, con el que se contemplaría realizar las “operaciones conjuntas” contra el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel de Sinaloa (CDS), La Familia Michoacana (LFM), Cárteles Unidos (CU), Cártel del Golfo (CDG) y Cartel del Noroeste, organizaciones que de acuerdo a un reporte del diario The New York Times serán designadas organizaciones terroristas el miércoles 19 de febrero por el Departamento de Estado estadounidense.
Juan Velediaz / @velediaz424 / EstadoMayor.mx