Ciudad de México, 14 de septiembre.– Aquellos viejos, muy viejos, jefes militares que conocí, recién desensillados del caballo, tenían un ayudante para, exclusivamente “aflojar” las botas. Ese calzado castrense que parecía hecho de pedazos de llanta, de una piel tan gruesa, de una construcción alrevesada de la forma del pie.
Etiqueta: Antonio Riviello
La oficina del tercer piso…
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•Todo puede pasar en los últimos cinco minutos…nada escrito para la sucesión en la Sedena
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•México, 28 de agosto.- Un día el general Antonio Riviello, muy cerca del final del sexenio de Carlos Salinas de Gortari, me dijo que había que incluir en la lista de la sucesión al general Enrique Cervantes Aguirre que no estaba entre sus favoritos.