Cuarteleras

México, 16 de enero.- La inconformidad por el alza en los precios de la gasolina en México molesta también a los militares. Y no a cualquier militar.

Quien alzó la voz y se dijo molesto, triste y con sueños imposibles de cumplir fue ni más ni menos que el general de División DEM, Sergio Aponte Pólito, ex comandante de la turbulenta II Región Militar, ex titular del Tribunal de Justicia Militar y ex candidato a ocupar el máximo cargo en la Secretaría de la Defensa Nacional hace dos sexenios.

Inquieto crítico de la corrupción e impunidad a donde quiera que lo enviaban a comandar zonas y regiones militares, el general Aponte publicó apenas la semana pasada una extensa y dura carta (como es su costumbre) titulada El gasolinazo y mi  tristeza, malestar, deseos y sueños, en la que se dijo triste y molesto por la decisión del gobierno federal.

Triste, porque durante sus 49 años de servicio viajó por todo el país y vio la riqueza natural en todo el territorio, sin embargo, “estos recursos  no han sido debidamente aprovechados en beneficio de la sociedad mexicana, sino que gran parte de estos recursos han servido para que algunos políticos y empresarios nacionales y extranjeros se enriquezcan, realizando fraudes, robos, engaños, sobornos, etcétera”.

Siento tristeza, escribió, “porque han pasado muchos años y la corrupción en PEMEX sigue prevaleciendo a través de concesiones y contratos indebidos e ilegales”.

El gasolinazo, junto con el aumento de gas, luz y en algunos Estados, también el agua y el Impuesto Predial, “afectarán negativamente el bolsillo de los mexicanos pobres, porque para los ricos y millonarios, será una distracción y no una pesadilla como lo será para millones de mexicanos, que se notará claramente cuando empiecen a subir los precios de los artículos de primera necesidad”, advierte el general Aponte en su carta.

Malestar, dice, porque el gasolinazo “fue aplicado en un momento en que la sociedad ha sido afectada negativamente en su moral, economía y bienestar, al estar recientes los siguientes eventos desagradables:

Ex gobernadores corruptos que con muchos meses de anticipación fueron denunciados y no se hizo nada para llevarlos a prisión y expropiar sus bienes, entre éstos se encuentran:

“Javier Duarte, de Veracruz, acusado de uso indebido de recursos públicos por 35 mil millones de pesos,  desvío de recursos públicos por 14 mil millones de pesos; además, dejó una deuda pública de 182 mil 895 millones de pesos.

“César Duarte, de Chihuahua, acusado de desfalco público por 7 mil 207 millones de pesos, desvío de recursos públicos por 80 mil millones de pesos, pagar una deuda pública con recursos públicos por 4 mil millones de pesos  y dejar una deuda pública por 55 mil millones de pesos.

“Roberto Borge, de Quintana Roo,  acusado de rematar el 10% de la reserva territorial del Estado a familiares y personas cercanas, además de irregularidades en la cuenta pública por 25 mil 300 millones de pesos.

“Guillermo Padrés, de Sonora, acusado de desfalco público por 2 mil millones de pesos, lavado de dinero y defraudación fiscal  por 8 mil millones de pesos; construyó una presa en un rancho de su propiedad y dejó una deuda pública de 32 mil 538 millones de pesos. Es el único que está en la cárcel” http://zetatijuana.com/2017/01/13/el-gasolinazo-y-mi-tristeza-malestar-deseos-y-suenos/.

El general Aponte Pólito alzó la voz como lo hizo cuando fue comandante en varias zonas y regiones militares, en donde sus palabras y acciones no gustaron nada a la clase política gobernante, a algunos empresarios y a muchos policías y funcionarios de diversas áreas de seguridad pública.

Nada más es cosa de recordar el revuelo que causaron sus declaraciones, cartas y acusaciones denunciando corrupción e interferencias para que el ejército cumpliera con las misiones en contra de la delincuencia.

En abril de 2008, por ejemplo, cuando era comandante de la II RM en Tijuana, Baja California, publicó una extensa carta señalando con todo detalle diversos hechos, describiendo actos de corrupción y acusando a políticos, a partidos, gobernantes y funcionarios de estar coludidos con grupos criminales CARTA  2008 http://archivo.eluniversal.com.mx/notas/501268.html.

Antes de que comenzara el 2010, el general Sergio Aponte Pólito fue removido por el alto mando y enviado al Tribunal de Justicia Militar en la capital del país para tranquilizar las aguas y sanar el descontento que dejó su paso por la entidad.

En diciembre de 2015 el general regresó a Baja California y contrario a lo que todo mundo esperaba, habló fuerte de nuevo en una entrevista en la que advirtió que la corrupción seguía galopante y que si el crimen organizado continuaba marcando el paso era porque las autoridades lo permitían.

El general dijo entonces, entre otras cosas, que los criminales “han tenido el apoyo de las autoridades a lo largo y ancho del país, unos permitían el sembradío, otros permitían el tráfico, otros tenían que proteger la distribución en otro país, porque en el Sureste viene la entrada de droga importante de los países centroamericanos o de Sudamérica, y aquí en estos Estados del Norte qué viene: la salida de la droga en el mercado principal, que es los Estados Unidos. Y desgraciadamente muchos gobernadores permitieron ese crecimiento y fortalecimiento de las bandas” http://zetatijuana.com/2015/12/21/las-denuncias-del-general/.

Polémico y directo, el general Aponte encendió ya la pradera. Es, hasta el momento, el único militar importante en retiro en defender su derecho a expresar sus opiniones.

¿Quién más se apunta?

Redacción

Estado Mayor MX