Revisará la Fuerza Aérea Mexicana si uno de los F-5 todavía puede volar

Foto: Especial

México, 28 de mayo.- Antes de que termine el primer semestre de este 2018, la comandancia de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) deberá tener el reporte final sobre el estado operativo de la célula de uno de sus jets de pelea F-5F Tiger II, para saber si vale la pena reactivarlo por lo menos durante un año más.

La comandancia de la FAM necesita conocer ese dato para saber si aún es posible integrar al caza F-5F, un biplaza con la matrícula 4501, a la flota de 300 aeronaves que integran el orden de batalla del ejército del aire mexicano.

El 4501 es el avión líder del Escuadrón Aéreo 401 (EA 401) de la FAM, comprado en 1982 para al ala de pelea integrada entonces por el Escuadrón Aéreo 202, integrado por cerca de 60 aparatos estadunidenses T-33 de la firma Lockheed Martin.

Datos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) indicaban en 2006 que el costo unitario de los tigres F-5E fue de 5 millones 822 mil dólares, mientras que el de lo T-33 Shooting Star fue de 9 millones 470 mil dólares.

De acuerdo con documentos de la Sedena, además del tigre 4501 otras cuatro aeronaves del EA 401 podrían ser consideradas como operativas si también pasan las revisiones ordenadas por mando aéreo. Se trata de los aparatos matrícula 4502 (el segundo biplaza del escuadrón), 4503, 4504 y 4505.

Por lo pronto el aparato que será sometido a Inspección Programada No Destructiva (NDI), en un proceso de adjudicación directa a una sola empresa especializada en este tipo de revisión.

En cuanto al caza 4501, éste será sometido al menos a varias pruebas de revisión no destructiva como son las de Corrientes de Eddy, Rayos X, Partículas Magnéticas, Líquidos Penetrantes, Boroscopía y Ultrasonido.

La medición por Corrientes de Eddy es un método no invasivo de inspección electromagnética que busca detectar fallas o alteraciones a nivel superficial en una estructura, de tal forma que la detección arroje datos sobre alteraciones internas de la pieza a revisar.

Las pruebas de Líquidos Penetrantes sirven para detectar imperfecciones en la superficie de la estructura de la aeronave. Es un método no destructivo utilizado sobre materiales metálicos y no metálicos que no tengan características de porosidad. Los líquidos aplicados penetran la superficie, mostrando los puntos de discontinuidad o imperfección.

El método de Partículas Magnéticas es más rápido efectivo que el de Líquidos Penetrantes. Se le considera complementario y consiste en magnetizar la pieza o piezas a revisar, impregnándolas luego con polvo de limadura de hierro que luego, con aplicación de corrientes, mostrará las posibles deformaciones o defectos en la estructura.

El método por Boroscopía consiste en la utilización de un equipo con diminutos lentes de precisión para localizar defectos internos, alteraciones, daños en la pieza analizada.

La adjudicación no cuenta aun con fecha de inicio y de término de los servicios solicitados ni fecha de duración del contrato.

En marzo y julio de 2016, la Sedena licitó públicamente dos servicios de reparación y mantenimiento para cinco aviones F-5 que incluían refacciones menores para cinco motores.

En 2017 hubo otra ronda de refacciones y servicio para aviones F-5 en la que participaron las empresas Aeroin Products S.A.de C.V., Avia Industrial S.A. de C.V., Comercializadora Luadmis S. A. de C.V., Partes Aéreas Concorde S.A. de C.V., Proveedora Aérea Mexicana S. A. de C.V., Sarayu Comercial S.A. de C.V., Aeroedma S.A. de C.V., 27 Micras Internacional S. A. de C.V. y Técnicas Mercantiles S.A. de C.V.

En esa ocasión el costo de las reparaciones no rebasó los 300 mil pesos.

 

Jorge Medellín

@JorgeMedellin95

Estadomayor.mx

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