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México, 23 de febrero.- Todo indica que en la Comandancia de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) hubo un cambio de señales –proveniente, claro, desde la oficina del alto mando– y a última hora los encargados de la compra de aeronaves no tripuladas se decidieron por un lote de tres aparatos Hermes 900, del fabricante israelí Elbit Systems.
La versión que corre en la comandancia de la FAM dice que la decisión de adquirir los Hermes 900 obedece a una posible compra estratégica de mayor envergadura que involucraría a una flotilla de cazas F-16 dados de baja recientemente por la Fuerza Aérea de Israel hace poco.
Elbit y sus Hermes son viejos conocidos para la Sedena. Los primeros sistemas aéreos no tripulados adquiridos por la FAM fueron precisamente los aparatos Elbit, pero de la serie Hermes 450, comprados en paquete con tres sistemas mini UAS Skylark, para operaciones contra el narcotráfico.
La Sedena compró su primer Unmanned Air System (Sistema Aéreo No Tripulado-UAS) en 2008. Era un Hermes 450, con capacidad para mantenerse en el aire durante 18 horas y operar a distancia de 200 kilómetros aproximadamente.
El aparato costó 25 millones de dólares y con el se adquirieron tres mini UAS Skylark, para operaciones menos demandantes. Su capacidad de vuelo es de tres horas y pueden alejarse hasta 15 kilómetros de su punto de lanzamiento.
Pues bien, todo indica que la FAM incrementará su flota de aparatos (un Hermes 450 y tres mini UAS Skylark) con otros tres Hermes de la serie 900, considerados por especialistas como los más avanzados en América Latina.
El Informe la Labores de la Sedena del 2014 revelaba que el Hermes 450 había realizado 39 misiones entre septiembre de 2013 y agosto de 2014. El plan de modernización de la FAM adelantaba que en este año se estarían adquiriendo otros tres UAS para darle mayor versatilidad y durabilidad a la flota de estos aparatos.
Entonces, todo indica que la mesa está servida y que serán los Hermes900 los nuevos invitados de la FAM, pero hay un pequeño inconveniente…
En junio de 2016 un reporte de la Sedena obtenido mediante la ley de acceso a la información reveló que los Hermes 450 estaban entre los aparatos que más fallas presentaban durante su operación.
Los Hermes 450 reportaban, según la Sedena, 468 fallas en 3 mil 515 horas de vuelo certificadas desde su entrada en operación en el 2009.
Mandos de la FAM viajaron a finales de 2016 a Israel para conocer más detalles sobre la operación del Hermes 900, pero sobre todo para revisar con los especialistas de Elbit Systems la cadena de fallas de su gemelo de la serie 450.
Con esta decisión, es altamente probable que la FAM deje de lado la otrora segura compra de los drones avanzados Predator XP o Grey Eagle, de fabricación estadunidense, con prestaciones superiores a los Hermes 900 y de los cuales uno se planeaba artillado.
El Análisis Costo-Eficiencia que en su momento presentó la Sedena ante la SHCP indicaba que “la Secretaría de la Defensa Nacional y la Fuerza Aérea Mexicana, evaluaron la situación actual de la capacidad que se tienen para cubrir la demanda de este tipo de operaciones; siendo necesario garantizar la coordinación y cooperación entre la Secretaría de la Defensa Nacional y organismos superiores, subordinados y adyacentes, para la consecución de sus misiones en el territorio nacional, acorde a lo planteado en la meta de un México en paz establecido como primicia en la presente administración pública y en la estrategia de fortalecer las capacidades de respuesta operativa de las Fuerzas Armadas”.
El costo inicial del proyecto era de poco más de 502 millones de pesos, pero los “gastos estimados totales de mantenimiento y operación del activo en el horizonte de evaluación” presentados por la Sedena elevan el costo en otros 723 millones, 266 mil 242 pesos.
El proyecto quedaría finalmente en 1, 225 millones, 943 mil 199 pesos por la compra de un sistema avanzado de vigilancia aérea cuya vida útil se estimaba en 15 años, esto de acuerdo con lo publicado en la página de la SHCP relativa a los programas y proyectos de inversión de todas las dependencias del gobierno federal.