¿Como por qué debemos salir a partirles la madre? Luis Miranda incita a la violencia

México, 23 de septiembre.- Hay muchas formas de entender el “llamado” del secretario Luis Miranda a la violencia, lo inequívoco en todos los análisis es la aceptación de un Estado omiso. Un Estado, un Gobierno que no puede proteger a los ciudadanos del mal.

De manera coloquial, supongo que así se debe expresar en privado, el nuevo titular de Sedesol, tan cercano al primer mandatario, pidió en Querétaro que los ciudadanos les “partieran la madre” a los malos.

Primera pregunta: ¿Quiénes son esos “malos”? ¿Y la Constitución que otorga la presunción de inocencia a todos los mexicanos? ¿Cómo se identifican esos “malos”?

Incluso si los “malos” a los que se refirió Miranda lo fuesen, es decir fuesen los más perversos y malvados del universo entero, cómo se les puede “partir la madre” legalmente. Porque golpear, “madrear” dijesen, o matar como se puede entender, es un acto ilegal.

Nuestra convivencia social pone en manos de la autoridad el “castigar” a los “malos”. O así lo entendimos muchos millones de mexicanos por muchos años.

Miranda pidió, literalmente, que le “rompiesen la madre” a quienes “quieren venir a su pueblo a quitarles el orden, la paz y los beneficios” Ignoro cuáles son los “beneficios” a los que se refirió pero la acepción de los conceptos es tan difusa como extensa. ¿Quiénes quitan el orden? Porque millones de mexicanos podrían contestar que los bloqueos de los maestros, o de los familiares de los 43 estudiantes, les quitan ese orden tan apreciado por Miranda.

De donde, elemental, debemos entender que la respuesta correcta para estos millones de mexicanos es “romperles la madre”.

No se trata de que, a veces, den ganas de hacerlo, sino de que la autoridad hizo ese llamado. Un funcionario público del más alto nivel, con relación muy directa, son compadres, con el Presidente.

¿Qué tal si les están diciendo, en ese contexto, en esa naturalidad extrema de Luis Miranda, a los soldados, a los policías federales, justamente esto?  ¿Si las ordenes que reciben las autoridades son de “romperles la madre”? De ser así entenderíamos casos como Tlatlaya o Tanhuato, por citar solamente dos confrontaciones con la autoridad donde ha habido muertos civiles.

¿A quiénes les “rompemos la madre” siguiendo la petición de Luis Miranda?  ¿A quiénes nos miran feo en la calle porque se ven, francamente, “malos”?

¡Qué peligrosa expresión!

Como no se ha disculpado públicamente, el señor Luis Miranda debe pensar que es lo correcto. Que corresponde a los ciudadanos “romperles la madre” a todos los malos que quieran quitarles “beneficios”.

¿Y si lo hacemos? Porque en Michoacán se organizó la población, eso que llaman sociedad civil para, justamente, hacer lo que pidió Miranda: “Romperles la madre” a los malos, a los narcotraficantes, a los que les pedían derecho de piso, a quienes no les permitían vivir en orden. Entonces, de acuerdo con este criterio, habría que poner en libertad inmediatamente al doctor Mireles y otorgarle un reconocimiento oficial.

¿Y la Ley?

Hablando de leyes, supongo que se le olvidó al secretario de Sedesol, decir que debemos “pasárnosla por el arco del triunfo”, o que “vale sombrilla” La Ley, esa entelequia, es la que impide que todos los mexicanos, sean oriundos de Querétaro o de cualquier otra entidad federativa, salgan a la calle a “romperle la madre” a quien se les ocurra.

¿Será Miranda abogado? ¿Cómo subsecretario de Gobernación habrá conocido las normas legales vigentes para la autoridad, para los ciudadanos, para todos los mexicanos?

Ahora bien, si fue, solamente, una puntada, una ocurrencia, una barrabasada oral del nuevo integrante del Gabinete, que alguien le explique que no es así, que en este país no importan cuánto queramos romperle la madre a alguien, o cuánto nos hayan destruido nuestro “orden” unos “malos”, no se hace porque si empezamos no vayan a llegar los “rompedores de madre” a las oficinas públicas.

Isabel Arvide

@isabelarvide

Estado Mayor MX

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